¿Conoces las señales que te indican que tienes que alinear la dirección del coche?
Estar al día con el mantenimiento y las reparaciones necesarias puede ser un reto para cualquiera, especialmente si tu coche ya tiene unos años.
No obstante, uno de los requisitos cruciales para que tu coche funcione con seguridad es la correcta alineación de las ruedas o, lo que es lo mismo, la correcta alineación de la dirección.
Lamentablemente, también es una de las cosas que más se olvidan, ya que puede pasar desapercibido si no prestamos atención. Justo por ello, la mala alineación de la dirección afecta a muchas personas, y a menudo no se dan cuenta de lo sencilla que es su corrección.
Si tienes dudas de alinear la dirección del coche, lo mejor que puedes hacer es llevarlo a tu taller de confianza, en donde te dirán si es lo que realmente necesitas.
En el momento en que se descubra el problema, lo mejor es actuar rápido, porque una alineación incorrecta de las ruedas puede provocar diversos problemas de conducción y desgaste prematuro.
Aunque no afecte a la seguridad de tu vehículo, el dinero que te ahorras al evitar el desgaste prematuro de los neumáticos suele ser mayor que el coste de la alineación.
Todas las piezas de la dirección y la suspensión deben inspeccionarse siempre junto con las comprobaciones de la alineación, porque las piezas desgastadas son una razón muy común para que la dirección deje de estar alineada.
Seguramente te sorprenderá lo bien que se conduce el coche después de haber examinado la suspensión y realizado una alineación.
Tu volante debería estar casi exactamente recto si vas en línea recta por una carretera plana y nivelada.
Dependiendo de la inclinación de la carretera, suele permitirse una pequeña diferencia, pero en general, el volante debería estar recto y centrado. Con el logotipo de la marca del volante recto.
Si puedes apreciar que el volante no está bien centrado o que tiende hacia uno de los lados, entonces ha llegado el momento de alinear la dirección del coche.
Esto hará que tu volante vuelva a estar en el centro y podría hacer que la conducción sea más manejable en general.
En relación al punto anterior, es muy posible que notes que el coche tiene a desviarse hacia uno de los lados, ya sea izquierda o derecha.
Esto se aprecia muy bien cuando las carreteras son llanas y rectas.
La idea de que el coche debe ir absolutamente recto cuando sueltas el volante está muy extendida. Lo cierto es que es verdad a medias, ya que puede que el coche se esté desviando hacia un lado por la inclinación de la carretera, aunque en apariencia sea una carretera muy plana. Además, no se aconseja quitar las manos del volante en ningún momento.
Si se necesita alinear la dirección del coche, realmente notarás que es el propio vehículo el que tiende a desviarse hacia uno de los lados, no necesitarás hacer pruebas soltando el volante ni nada por el estilo.
En el momento en que lleves a alinear la dirección del coche, verás que esa incómoda sensación desaparece y, con ello, se mejorará la conducción en general.
Los patrones de desgaste de los neumáticos pueden revelar muchos detalles importantes sobre el estado de un coche. Y, lo cierto, es que una persona entendida en la materia puede saber mucho sobre el estado de un vehículo sólo mirando el desgaste de los neumáticos.
En este caso, si se necesita alinear la dirección del coche, los neumáticos estarán desgastados por sus bordes interiores o exteriores.
La mayoría de las veces, un mecánico identificará el deterioro de los neumáticos al hacer un cambio de los mismos o una inspección como parte del mantenimiento rutinario.
No obstante, si eres tú mismo el que observa algún patrón de desgaste inusual en los neumáticos, deberías hacer revisar la alineación de tu vehículo. Una alineación adecuada alarga considerablemente la vida de tus neumáticos.
Una de las posibles causas de que la dirección de tu coche se sienta un poco descuidada o incluso poco manejable, es una mala alineación de las ruedas.
Si esto es así, sentirás que conducción en las curvas puede parecer demasiado forzada, como si estuvieras haciendo algo mal.
Si experimentas síntomas similares a éstos, debes llevar a alinear la dirección del coche, y verás que después la conducción será normal nuevamente.
Cuando sigues conduciendo después de terminar un giro, el volante debería empezar a centrarse por él mismo.
Naturalmente, debes mantener las manos en el volante para acelerar el proceso y mantener el control del vehículo.
Sin embargo, puede suceder que el volante ni siquiera haga un esfuerzo por volver a colocarse en el centro, lo que sería un claro indicio de que ha llegado el momento de alinear la dirección del coche.
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